La nieve
es un fenómeno meteorológico que consiste en la precipitación de pequeños cristales
de hielo. Los cristales de nieve adoptan formas geométricas con características
fractales y se agrupan en copos. Está compuesta por pequeñas partículas ásperas
y es un material granular. Normalmente tiene una estructura abierta y suave,
excepto cuando es comprimida por la presión externa.
Hay tres factores que crean una tormenta de nieve:
·
Aire frío: cuando la temperatura en las nubes y en la tierra están
bajo cero
·
Humedad: la concentración de agua en el aire la cual
provienen principalmente de los cuerpos de agua (río, lago, océano)
·
Combinación de los frentes cálidos
y fríos: el aire de ambos al chocar hace que la humedad se alce formando
nubes y precipitación.
Cuando una intensa tormenta de nieve o nevada es acompañada por fuertes
vientos se conoce como una ventisca de nieve. Para ser más específicos una
intensa ventisca de nieve es cuando cae un gran volumen de nieve y los vientos soplan a más de 55 kph (35 mph), dejando una
visibilidad de menos de 380 m (1/4 de milla) por un tiempo prolongado (más de
tres horas). No hace falta mencionar que son bastante peligrosas. También son
notables por tirar árboles, postes de
luz y cables de energía. Estas
intensas tormentas de nieve pueden paralizar toda una ciudad al afectar las funciones
cotidianas citadinas o rurales, servicios médicos o de emergencia y quién no se
ha quedado atorado en un aeropuerto por más tiempo de lo que esperaban.
Las
nevadas inesperadas a veces deterioran las infraestructuras e interrumpen los
servicios, incluso en las regiones que están acostumbradas a ellas. El tráfico
se puede ver entorpecido o incluso detenido totalmente. Las infraestructuras básicas
tales como electricidad, teléfono y gas natural pueden ser interrumpidas. Un
día nevado es frecuentemente un día en el cual la escuela u otros servicios son
cancelados debido a la precipitación. Esto puede suceder incluso en las áreas
que tienen por lo general muy poca precipitación de nieve con una acumulación
ligera.
Una de las tormentas más grandes de
nieve, azotó el noreste de los Estados Unidos, cubriendo un área que iba desde
Maine hasta Maryland y desde Búfalo hasta Pittsburg. La nieve alcanzó una
altura de 1,2 metros o más, y ventisqueros de 9 a 12 metros enterraron
literalmente a cientos de ciudades y pueblos. La tormenta afectó a la cuarta
parte de la población del país e incomunicó a una docena sus ciudades más
importantes. La nevada se inició justamente después de la medianoche del lunes
12 de marzo de 1888, después de un agradable y primaveral fin de semana, y
continuó durante el día con temperaturas de – 14 ºC y vientos de 80 kilómetros
por hora.
j
ResponderBorrarMuchas gracias por la información, me sirvió mucho para mi tarea :)
ResponderBorrar